lunes, 3 de junio de 2013

Now and then/Here today

 Cuando dos personas son amigos, mejor dicho "mejores amigos" durante años, su unión se hace más fuerte, su unión se hace irrompible. John Lennon. Paul McCartney. Dos amigos que por muy enfadados que estuvieran, nunca dejaron de ser hermanos.


1998 - Linda McCartney, alma gemela de Paul, abandona el mundo de los vivos y se va a otro lugar, lejos de aquí...

Era un oscuro día lluvioso, parecía que nada estaba a mi favor, ni siquiera las nubes, que peleaban por cubrir aquel sol que me había acompañado tantas veces junto a ella, junto a Linda. Aún recordaba sus ojos iluminados por la luz, y su sonrisa deslumbrándome cada vez que le cantaba alguna de las múltiples canciones que había compuesto para ella. Me acordaba de cada vez que había sostenido a alguno de nuestros hijos por primera vez y sus ojos cansados nos miraban, sonriendo a pesar del enorme esfuerzo que había hecho...ella sí era una mujer. Y si me paraba a pensarlo..¿qué haría ahora sin ella? Llevábamos casi 30 años casados...y no nos habíamos separado casi nada en todo ese tiempo; ahora tendría que cuidar a mis hijos solo..aún que eran ya mayores, no me necesitaban tanto como antes, pero aún así todos nos sentíamos hundidos, completamente hundidos, se podía sentir en el ambiente, sus miradas caídas, sus largos suspiros, lo poco que hablaban...se veía a kilómetros que algo no estaba bien. Pero algo en mi ser me decía que alguien especial no me había dejado solo en esa situación especial, que ese chico se "había enterado" de mi noticia, de la noticia de mi pérdida y había decidido bajar de su mundo hasta el mío, hasta el de los vivos, y sentarse a mi lado en aquel coche negro. Miré por la ventana y fue como si viese a John una vez más sentado en un banco, fumando.


2003 - Nacimiento de Beatrice

Mientras cruzaba corriendo las puertas de aquel hospital, tan blanco y lleno de gente, pensaba en todos mis otros hijos, y ahora ¿una nueva hija? Era algo sorprende, la verdad, sobre todo por mi edad, yo, con sesenta y pico años, había tenido una hija, o estaba naciendo en ese momento, y yo tenía que estar al lado de Heather, sí, tenía que estar ahí, era hija de los dos, la pequeña Beatrice...¿qué pensaría John de eso? Seguramente haría alguna de sus bromas guarras sobre mi capacidad de dejar embarazada a las chicas y yo le daría un golpe en el hombro, un golpe de amigos, y nos reiríamos mientras fumábamos un buen cigarrillo. Pero ahora...una nueva responsabilidad en mi vida, y muchas explicaciones que tendría que dar a la prensa, como era típico. 
Entré en la habitación donde estaba Heather, me habían dicho que la niña ya había llegado a este mundo, así que podía entrar sin peligro de desmayarme por la sangre. Puse una enorme sonrisa al entrar, me sentía feliz en ese momento, era padre, de nuevo, y era una sensación que llenaba el alma hasta su último rincón. Vi a mi pequeña en los brazos de su madre y me acerqué. Cuando la cogí en brazos sentí una mano sobre mi hombro, como dándome la enhorabuena, y supe que John  estaba ahí de nuevo.

2011 - Boda con Nancy

Después de mi difícil divorcio con Heather todo había ido mejor, como cuando vas con el coche cuesta abajo, y mientras colocaba mi pajarita para ir al juzgado y casarme de nuevo supe que junto a aquella mujer podría ser feliz de nuevo. Tenía hijos ya adultos y una hija aún pequeña, pero que pronto se haría mayor. Ringo me había mandado su regalo de bodas y la limusina me esperaba. En el viaje de ida fumé un poco, hacía tiempo que no fumaba pero en aquel momento era necesario para mi, me traía recuerdos de viejos tiempos, tiempos en los que la gente que quería aún estaba a mi lado y no habían abandonado este mundo, o por lo menos la mayoría. Mis ojos se fijaban en el humo que inundaba la limusina y me pareció incluso ver que una imagen se formaba en él, pero...¿qué demonios llevaba ese cigarrillo? Miré la cajetilla y no aparecía ningún componente extraño, quizá era yo que me estaba volviendo loco. Suspiré y volví a mirar el humo, era la cara de alguien, de...John. ¿Era eso posible? Al parecer sí..estaba pasando. Y la imagen sonrió...esa imagen me había llenado el corazón, estaba él de nuevo a mi lado, en aquel día especial, sin abandonarme. Y supe que aún que nos hubiéramos enfadado, él siempre sería mi mejor amigo.

2012
Abrí los ojos lentamente y esperé a que se habituaran a la falta de luz. Miré a mi lado y Nancy estaba dormida, con el largo pelo marrón por delante de la cara, los ojos cerrados, la boca entreabierta y la respiración ligera.
Me incorporé un poco en la cama y me froté ligeramente los ojos. Miré el reloj de mi mesilla, eran las 5 a.m.
Tenía sed, mucha sed, por lo que bajé a la cocina y me eché un poco de agua en un vaso. Mientras bebía escuché un ruido proveniente de mi sala de música. El corazón se me paró, ¿era un ladrón? Busqué en el cajón uno de los cuchillos más afilados y dejé el vaso en la encimera.
Caminé por el pasillo lentamente, intentando hacer el menor ruido posible. Contenía la respiración y oía los latidos de mi corazón, me parecía increíble que no se oyese el eco por toda la casa. Doblé la última esquina del pasillo y vi la puerta de la sala de música. Oía el sonido del extraño que estaba en mi casa, pero… ¿estaba tocando mi piano? Todo era muy extraño…
Me acerqué temeroso a la puerta, ¿era mejor llamar al de seguridad? Al final decidí no llamarle e intenté escuchar que pasaba dentro de la habitación. Lo que sonaba era… ¿Now and then? ¿La canción que John… había escrito para mí? Eso era aún más extraño… Cogí aire y abrí la puerta lentamente. El hombre estaba de espaldas, sentado en mi caro piano de cola negro. Tenía el pelo castaño, largo y ligeramente ondulado. Empezó a cantar la letra de la canción, una letra que conocía perfectamente.
I know it's true, it's all because of you
And if I make it through, it's all because of you
And now and then, if we must start again
Well we were not sure, that I love you
Me acerqué silenciosamente al hombre, pero de algún modo supo que estaba en la misma habitación que él y paró de tocar, se giró y me sonrió desde detrás de unas pequeñas gafas redondas.
Una parte de mi mente se negaba a creer lo que mis ojos veían, pero la parte soñadora y sentimental obligó a mis piernas a caminar hacia el piano y sentarse junto al visitante. Sonreí como no había hecho en meses y empecé a tocar “Here today”, mi canción para John.
And if I say I really knew you well
What would your answer be.
If you were here today.
Paré de tocar y le miré, creo que esperaba una respuesta a una pregunta que había formulado más de una vez pero siempre había quedado sin responder.
-       -Pues, si estuviera aquí, diría que yo también te conozco bien Mcca – dijo John mientras me abría los brazos
Le abrí los míos y nos abrazamos como nunca habíamos hecho, John estaba aquí, hoy, conmigo.
-      - Paul, ¿sigues durmiendo en calzoncillos y camiseta? Esperaba un poco más de un hombre de 70 años – dijo riéndose
-       -Yo nunca me quejé de que durmieses solo en calzoncillos, y a Nancy no creo que le importe que duerma así – dije sonriendo
-       -Cierto. Y esa Nancy… ¿cómo es en la cama? ;)
-       -Sigues igual de pervertido que hace treinta años, esperaba un poco más de un hombre de 72 años
-       -Sabes que yo nunca maduraré, y ahora, responde a mi pregunta o tendré que ir a tu punto débil
-       -Bueno, te lo diré, para que mentirte, eres mi mejor amigo. Es… como decirlo… buena
-       -¿Mejor que aquella chica de pelo negro en el Shea? Ya sabes, en el 1965
-       -No, mejor que ella no jajajajaja – miré a John divertido mientras se rascaba la nuca, seguramente recordando a aquella jovencita
-       -¡Qué tiempos...!
-       -John… todo esto es… ¿real? – dije dudoso
-       -¿Por qué no iba a serlo? Tú me ves, yo te veo… - se encogió de hombros y apoyó la mano en el piano
-       -Pero tú…
-       -Estoy muerto, lo sé, pero, ¿de verdad creías que te iba a dejar en paz aun que me muriese? Eso es que no me conoces tan bien James Paul McCartney – se rió divertido por el comentario
-       -Entonces… ¿esto no es real?
-       -Sí lo es, pero aquí – puso su dedo en mi frente – y aquí – lo puso en mi corazón
Mis ojos se inundaron de lágrimas, aquello era solo un sueño, John no estaba vivo de verdad.
-       -Paul, sé que es duro de entender, a mi también me gustaría estar aquí, contigo, con Yoko, con Julian y con Sean, pero la vida sigue, y yo nos os he abandonado a ninguno de vosotros
-       -Pero las cosas no son iguales sin ti John, te extraño
-       -Y yo Paul, pero las cosas son así. Solo he venido a decirte que nunca te voy a abandonar, me llevas en el corazón, y siempre voy a estar a tu lado, pase lo que pase, somos mejores amigos ¿no?
-       -Sí, para siempre – sonreí y me sequé las lágrimas
-       -¿Un abrazo? – dijo abriéndome los brazos
-       -¡Claro! – dije animado.
Nos dimos otro abrazo lleno de emotividad y sentimiento.

Me desperté bruscamente y miré a mi alrededor. Estaba tumbado en mi cama, Nancy estaba dormida a mi lado. Miré el reloj y eran las 5 a.m.
Todo había sido un sueño, pero quizá…
Bajé corriendo y entré en la sala de música, me senté en el piano y algo me llevó a tocar “Here today” y una vez más, supe que él estaba ahí conmigo.